Pacientes atendidos, familias tranquilas… Contratar a un cuidador profesional en casa

En algunas ocasiones, pareciera que la enfermedad de un ser querido rebasa al resto de la familia. Y es que la situación no sólo demanda de un gran trabajo coordinado y en equipo, sino que también puede implicar el no saber cómo actuar ante determinada situación. Existen pacientes que requieren de cuidados particulares. Y por mucho que el médico especifique a los familiares del enfermo qué medidas deben tomarse, a veces no se tiene el tiempo, la habilidad u ocurren imprevistos que poco a poco van desgastando a los involucrados.

Por fortuna, existen alternativas que pueden aligerar lo difícil que puede ser tener a un ser querido con ciertas necesidades médicas y al mismo tiempo, brindar la certeza de que esa persona está siendo atendida correctamente. Hablamos de los servicios profesionales de cuidadores. Se trata de grupos conformados por expertos, enfermeras e incluso niñeras, al servicio de quien los solicite. Según las necesidades del paciente y la familia, se encargan de elegir a la persona ideal para cada situación.

¿Cuidar de algún adulto mayor mientras la familia se encuentra trabajando? Ellos lo resuelven. ¿Una enfermera capacitada para monitorear la salud de un enfermo? Ellos la tienen.

Antes de contratar a expertos en cuidados profesionales, toma en cuenta:

- Su calidad. Debe tratarse de personal que esté altamente capacitado y en constante supervisión.

 - Su servicio. Una atención profesional siempre va más allá. Por ejemplo, un cuidador de adultos mayores también debe promover la independencia del paciente y alentarlo, una enfermera necesita centrarse en la atención y recuperación del ser querido, una niñera requiere saber sobre manejo de horarios, asistencia en el baño y hasta estimulación temprana. Fíjate bien en quién estás contratando.

 - Sus referencias. Un servicio que se considere profesional debería contar con alguna página web con acceso a opiniones de otros usuarios, referencias e incluso saber si ha sido recomendada en otros portales y hasta en medios de comunicación.

 - Sus costos. Contratar un servicio profesional no tendría por qué estar peleado con la accesibilidad de sus costos. Algunos incluso ofrecen facilidades de pago.

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Ventajas de tener a un cuidador profesional en casa

1. Ubicación. Nada como el hogar. El cuidador puede acudir al domicilio del enfermo y estar al pendiente de su bienestar, con el beneficio de hacerlo en un lugar donde el paciente se siente cómodo y, sobre todo, mantiene un constante contacto con la familia. Y esto puede hacer una gran diferencia en su estado anímico, pues está en contacto con su entorno y objetos preciados.

 2. Prioridad. En otros lugares, la concentración de un cuidador podría repartirse entre varios pacientes. Pero cuando es un profesional contratado especialmente para tu enfermo, el trato es personalizado. De esta manera, conocerá sus gustos, preocupaciones y aquello que lo inspira a seguir saliendo adelante y dela mano de sus cuidados.

3. Confianza. Sin importar si tu ser querido tuvo algún imprevisto mientras no estabas, tienes la certeza de que el cuidador que contrataste supo qué hacer y cómo solucionarlo. Y lo hizo porque se trata de una persona calificada para ese trabajo y cuyo profesionalismo te dará la tranquilidad que necesitas.

4. Organización. Junto a un profesional, tu ser querido podrá adoptar ciertas rutinas que le vendrán de maravilla en su recuperación, como horarios para bañarse, rehabilitación, citas médicas y hasta para ingerir los medicamentos administrados. Ya no hay que preocuparse por ello. Déjalo en manos del cuidador.

 5. Bienestar para todos. Cuando un profesional se encarga de toda lap arte médica de un paciente, lo que le toca a la familia es ocuparse de la parte afectiva. Al poner su bienestar físico en manos de los que saben, tú puedes tener tiempo de calidad con tu ser querido: convivir, jugar, ver alguna película, salir si es posible, distraerse juntos… aprovechar la gran oportunidad de estar cerca. No dejes que el valioso tiempo que tienen juntos se vaya entre inyecciones y citas médicas. Disfruta a tu ser querido y dile lo mucho que lo quieres.

Y para que todo salga perfecto, considera lo siguiente:

- La opinión de la persona involucrada. Acércate a tu ser querido y hazle saber la importancia de contar con alguien calificado y preparado para cualquier contratiempo relacionado con su bienestar. Los cuidadores, enfermeros y niñeras aman su trabajo, así que seguro a ambas partes les será fácil congeniar y llevarse bien en poco tiempo. 

- La situación y sus necesidades. No es lo mismo cuidar de una persona con Alzheimer que requerir a alguien solo para la aplicación temporal de medicamentos intravenosos y curaciones (los llamados servicios de corta duración). Considera los requerimientos de tu ser querido y sé muy específico para que los expertos en cuidados puedan enviarte a la persona perfecta.

- El trabajo en equipo. No todo cae en manos de los cuidadores. Su trabajo está garantizado, no hay duda, pero es labor de los familiares darle alser querido todo el tiempo de calidad posible (¡Toca aquí para leer nuestros mejores consejos!).Valoren el tiempo juntos y regálense mucho amor. De su bienestar, ya se estarán ocupando tanto médicos como cuidadores.

El valor de la tranquilidad

Sin importar si se trata de cuidar a algún adulto mayor, requerir de una enfermera o solicitar los servicios de una niñera, contar con alguien que pueda acompañar a la familia cuando más lo necesitan tiene un valor único.

Tener la certeza de que el bienestar de tu ser querido está en manos de un profesional te permitirá seguir dando el 100% en tus actividades cotidianas. Y lo mejor es que el costo puede ser más accesible delo que imaginas.

¿Qué te parece? ¿Qué te parecería invertir en el bienestar de tu ser querido y, a la vez, sentir la tranquilidad de saber que está recibiendo la mejor atención? Los beneficios lo valen.

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